jueves, 24 de julio de 2008

En agosto cerramos el chiringuito

Vaya semanita, y me la quería perder.

Lo siento en el alma, pero me ha sido imposible preparar una sorpresilla que tengo en la recámara concerniente a las novelas de Vade Retro!, en especial a la segunda parte. Así que en septiembre, cuando vuelva, voy a tener contenidos para parar un tren.

Me voy mañana viernes a Villanueva de los Infantes (C. Real), donde estaré hasta finales de agosto. Calculo que mi vuelta será para el 1 ó el 2 de septiembre. Sí, es un montón de tiempo, pero alguna ventaja tendría que tener estar el paro. En principio no quería estar tanto tiempo allí,
pero después de consultar el calendario con David, nos viene mejor adelantar trabajo durante esta última semana de Julio.

Este verano, Un día en la vida va a emitir la que será su última temporada en Infantes F.M. Sí, habéis leído bien. Nos despedimos. Pero nos despedimos sólo de la radio. Desde hace un tiempo, sentimos que tenemos mejor acogida en la red que en las ondas, que nuestro público está al otro lado de un monitor. Por eso queremos convertir el programa en varios podcasts, y el blog en una página web completa. Pero de todo eso ya os iré contando, tranquilos.

No voy a escribir nada en el blog durante mi ausencia, aunque podría hacerlo. Pero siempre me digo "a ver si saco un hueco..." y nunca lo hago, así que esta vez no me lo voy ni a plantear siquiera. Quiero descansar del blog, de la presión de tener una entrada cada semana. Además, entre la radio y planificar la web, contando con que estoy más o menos de vacaciones y luego vendrán las fiestas y todo eso, creo que ya voy a tener distracciones de sobra como para buscar tiempo que dedicarle a este blog.

Así que nada, a la vuelta de vacaciones volveremos con muchos contenidos en la reserva para que tengáis lectura de sobra. Ocasionalmente podréis ver alguna actualización en mi página de twitter, o en este mismo blog, en el menú de la derecha. Si por algún casual os da por dejar un comentario, o escribirme para preguntarme algo (cosa que no hacéis nunca), tened paciencia. Puede que tarde unos días en responder, pero lo haré.

Bueno, pues eso, que me marcho de vacaciones. Pasadlo bien, lectores barra oyentes, disfrutad de la playa, la piscina, la montaña, el pueblo... o de la gran ciudad si no os vais a ningún sitio, aprovechando que la urbe se quedará vacía. No hagáis nada que yo nunca haría o no os dejaría hacer, y volvedme todos en septiembre, que paso lista.

Hasta entonces, como decimos en el programa... ¡que se dé bien!

mighty_eldarion@hotmail.com (comentarios, sugerencias, preguntas, dudas e insultos en general)

domingo, 20 de julio de 2008

Habéis picado más de 2000 veces

Hola a todos.

Estos días están siendo bastante atareados preparando mi escapada anual a Villanueva de los Infantes. He tenido que probar un portátil que quiero llevarme allí para poder trabajar (no en el blog) y en general he estado lo suficientemente ocupado como para no poder preparar la entrada relativa a los correos hoax que seguía en la línea de la última que he publicado. Y sintiéndolo mucho, no creo que la tenga lista antes de mi viaje. Así que la dejaremos en asuntos pendientes para después del verano.

Sin embargo, quiero aprovechar para anunciar algo que podréis ver si echáis un ojo al contador de visitas que hay en el menú de la derecha. Bueno, como no creo que sea accesible a los lectores de pantalla para ciegos, antes de que David y sus compinches se me echen encima, os diré que el número de visitantes ha superado los dos mil.

Y la verdad es que, aunque no dejáis comentarios, he comprobado las estadísticas últimamente y el número de visitas no está nada mal. A diario entra gente para ver si hay nuevas entradas, o eso es lo que creo deducir de las estadísticas. Alegra saber que a pesar de que publico una vez a la semana, estáis pendientes del blog cada día. Imagino que seréis los cuatro de siempre, que miráis compulsivamente esta página en busca de nuevas parrafadas. También es verdad que cuando me toca publicar, las continuas correcciones me obligan a ver la página varias veces y eso algo influye en las estadísticas. Pero a pesar de todo, merece la pena.

Así que muchas gracias por todo ello. Y a los que siempre se quejan de que me explayo demasiado, voy a hacerles un favor y me callaré ya. Consultad el blog de aquí al próximo fin de semana.

mighty_eldarion@hotmail.com (comentarios, sugerencias, preguntas, dudas e insultos en general)

domingo, 13 de julio de 2008

Manual de ciber-etiqueta. 2.- FWD: Haciendo amigos

Hace unos años, cuando empezó a popularizarse esto de internet, oí una frase que venía a ser “nunca podré llorar sobre un e-mail”. A día de hoy compadezco a ese infeliz. Pensaba que la gente iba a usar el correo electrónico para escribir. Y sí que es cierto que cuando empezó a despuntar este tipo de correo (la killer aplication de la red), se comparó con la correspondencia escrita y generó un sinfín de apasionantes debates en los ámbitos de la socioligía, la comunicación, la filología y la lingüística.

La comparación con el correo tradicional no tardó en ser inapropiada. Digo esto porque la red es multimedia, y esto incluye al e-mail, obviamente. Por correo electrónico podemos enviar, además de texto, fotos, música, etc, e inlcuso podemos darle formato a nuestros mensajes (negrita, cursiva, fuentes de letra…) igual que en un procesador de texto sencillo. Creo que esto no hace falta que os lo explique ¿verdad? En definitiva, el correo electrónico iba más allá de la concepción inicial de ser una versión en ordenador de las cartas tradicionales.

Retomando el primer párrafo, quien dijese que no se podía llorar sobre un e-mail pensaba en esa concepción del correo electrónico como forma de enviar mensajes de texto. Y efectivamente. La gente usa el correo electrónico para casi todo, menos para escribir. Básciamente, abren el correo, leen los chistes y gilipolleces que tienen en la bandeja de entrada, y le dan al botón de reenviar. Podría sentar a un chimpacé ante mi ordenador y en un par de días sería usuario experto del e-mail en vista del uso que se suele hacer. Vale, ahora os dejo una pausa para que digáis eso de no, yo uso el correo para muchas más cosas (enumeración opcional), y todas ellas (ejem) son muy útiles y serias. Ya, y nadie veía Crónicas Marcianas, todos preferían los documentales de La 2.

Respecto a la manía de reenviar los correos tal cual, acumulando direcciones de e-mail, ya hablaré en la próxima entrada de ciberetiqueta. Además de eso, la gente lo usa para mandar todo tipo de archivos. Por suerte, apenas se mandan archivos ejecutables, potencialemente los más peligrosos (sí, ya sé que cualquier tipo de archivo lo es), pero no escatiman en adjuntar fotos, música, VÍDEOS, y sobre todo, archivos de Power Point.

Respecto a los vídeos, Youtube ha contribuido en parte a combatir esta costumbre. El archivo de vídeo es el que más “pesa”, por lo que la tarea de descargarlo al equipo y reenviarlo es la que más tiempo lleva, luego para un par de minutos de metraje. La red agradece que no la saturéis con archivos pesados circulando sin control.

Lo que parece no tener remedio es lo de los pps. El Power Point (nunca dejaremos de darte las gracias, Microsoft) es un programa pensado para preparar presentaciones. También sabéis cómo va: se van creando diapositivas con un título y las ideas relevantes para la presentación de turno. Todo bien maquetadito y sobre un fondo de diseño a escoger (a cualquier cosa le llaman diseño). Las diapositivas pueden imprimirse (las transparencias son más socorridas), pero últimamente parece menos engorroso enchufar el ordenador a un proyector y poner la presentación desde allí directamente. Y como los de Microsoft siempre van en plan “con esto puedes poner de todo”, se pueden insertar imágenes, sonidos e incluso vídeos (los dos últimos sólo valen para las presentaciones desde un PC, evidentemente). Además, las presentaciones desde un equipo pueden decorarse poniendo efectos en el texto, para hacer las transiciones menos bruscas. No es difícil, sólo un poco trabajo de chinos, pero si tienes paciencia y puedes dedicarle tiempo…

Para lo que no se diseñó Power Point es para cometer los atentados que pueden verse circulando por la red impunemente. Los delitos menores consisten en mandar un chiste o relato compuesto a base de diapositivas. Parece que tengamos alergia a leer y que nos tengan que vender que no es un texto, es una presentación. Como si envolverlo en un archivo pps mejorase el contenido. Para los archivos cuyo contenido sea texto lo mejor es usar procesadores de texto ¿no creéis? Un documento de Word ocupa menos. O mejor aún: usad archivos de texto con formato (rtf), que pueden abrirse con más aplicaciones, o incluso archivos de texto plano (txt), o simplemente escribid el texto en el cuerpo del mensaje de correo.

El delito contra el buen criterio va en aumento conforme se van añadiendo efectos de animación a los textos (algunos son infumables, como hacer que en una parrafada tenga que ir entrando letra por letra) y sonidos de un click de cámara fotográfica cada vez que cambia la diapositiva. La escalada se hace imparable cuando las diapositivas usan como fondo archivos de imágenes (bubólicos paisajes), incorporan ruidos o melodías de fondo (suelen ir parejas a los paisajes de ensueño), e incluso añaden vídeos. No voy a explicar caso por caso los ejemplos más típicos, pero seguro que os hacéis una idea. Para cada tipo hay formas más eficientes y racionales de enviar el contenido. Además, eso de tener un compañero de radio ciego me ha hecho bastante sensible a la accesibilidad de las tecnologías. Los pps no siempre pueden ser leídos por los lectores de pantalla de los invidentes.

Quitando la cuestión de lo horteras que pueden llegar a ser, el tema de sus contenidos tiene aún más miga. Desecharemos a priori los que son bulos y mentiras, ya que de éstos hablaremos en la próxima entrada, cuando analicemos los hoax. Muchos incluyen mensajes tipo carpe diem. Aprovecha el momento. Vive cada día como si fuera el último de tu vida y todo eso. Me pregunto si las parejitas que pidieron una hipoteca hace unos años, cuando los tipos de interés estaban por los suelos, se justificaban moralmente leyendo este tipo de mensajes. Lástima que no recibiesen en su bandeja de entrada algún pps que les dijese que la economía fluctúa (lo bien o mal que reaccione cada gobierno es un tema aparte). Pero la filosifía que adopte cada uno es cosa suya, ahí no me meto. Sin embargo, el bombardeo de mensajes trasfondo filosófico/moralista/ideológico produce un efecto curioso: dada la falta de criterio del usuario medio, éste envía entusiasmado cualquier tipo de mensajes, y cree sinceramente que llevan razón, aunque el que envía hoy dice lo contrario de lo que decía un mensaje de la semana pasada.

Una característica habitual de estas cadenas es el chantaje emocional. Te piden reenviar el mensaje a todos tus contactos, o a un número determinado de personas, o a tus seres más queridos… normalmente en nombre de la amistad. Un consejo: desconfiad de los correos que pidan ser reenviados. Estos correos dicen que han llegado a ti porque eres especial para el remitente, y te auguran todo tipo de cosas si lo envías… o si no lo haces. Yo debo de ser el peor amigo del mundo. Y seguramente siga soltero por no reenviar estas chorradas. Ah, y también está el subidón del espíritu navideño. Gente con la que has cruzado dos frases en un foro o chat te envía las típicas chorra-postales navideñas. Los ateos deberíamos unirnos y hacer campaña, alegando que estos mensajes ofenden nuestras creencias (o falta de ellas).

Para conluir. Mirad, cada uno es libre de usar su correo como quiera. Aparte de los ejemplos citados, hay cosas muy divertidas e incluso ingeniosas. Si pudiera dar un consejo, sería el típico consejo de un departamento de relaciones públicas: conoce a tu cliente. A algunos les gustarán las fotos de bebés, a otros los chistes, y a otros los vídeos porno. Si tenéis alguien recién agregado a vuestros contactos, le daréis muy mala impresión. Y por último, una opinión personal mía: no me siento más especial porque alguien me mande un correo que le ha mandado a otras veinte personas, por muchas fotos de bebé que tenga; me siento más especial si me envía un correo sólo a mí, sin archivos adjuntos, y me pregunta hola, Alfredo ¿cómo estás?

Os invito a participar a través de los comentarios. ¿Qué correos os gustan más y cuáles odiais? ¿Hacéis reenvíos masivos? ¿Habéis tenido algún roce con el típico pesado que reenvía 25 mensajes al día? Ah, y si alguno piensa que soy un impresentable, un insolidario y que deberían prohibirme procrear para evitar más gente como yo en este mundo… lo tengo asumido, gracias. Y a pesar de la longitud de esta entrada, esto no deja de ser una opinión y está ligeramente estereotipada y caricaturizada.

mighty_eldarion@hotmail.com (comentarios, sugerencias, preguntas, dudas e insultos en general).

domingo, 6 de julio de 2008

Timo Tolkki, revolucionando al personal


Ya es hora de que vaya poniendo algo por aquí, que empiezo a abusar de las colaboraciones de David. Voy a probar algo nuevo para esta entrada, y es hacer una crítica, o una reseña, de un disco. Al fin y al cabo, si David puede hacer críticas de cine aunque sea ciego, yo puedo hacerlas de música aunque tenga el mismo oído que una tapia.

El disco que quiero traer a colación es New Era, de la recién formada banda Revolution Renaissance. Este enrevesado nombre es el que ha cogido Timo Tolkki después de dar carpetazo a su anterior grupo Stratovarius para este nuevo proyecto. Como ya pasó con el anterior disco de los Strato (el álbum sin título, el de la flor de lis sobre fondo negro), éste viene precedido del revuelo y la polémica. Y es que en principio, se esperaba un nuevo disco de Stratovarius para este año, cuyo título no llegó a revelarse pero al que se referían con el nombre clave RR. De hecho, llegaron a tocar una canción en directo en el festival Wacken Open Air en 2007. Aquí empiezan las divergencias de puntos de vista. Los miembros restantes de Stratovarius dicen que el nuevo disco estaba previsto para que lo grabaran ellos (con Tolkki) y que el contrato con la discográfica Frontiers Records fue una jugarreta que les dejó, además, con pérdidas monetarias. Tolkki, por el contrario, sostiene que la grabación de las maquetas las financió él, y que firmó los contratos con Frontiers Records una vez hecha la ruptura de Stratoviarus. Cada cual cuenta su versión. Ha habido una serie de cruces de declaraciones, podéis leerlas todas en los links que hay al final de la página a la que os mando desde aquí (usad los mirrors), si es que tenéis tiempo y ganas. Estos finlandeses tienen serios problemas comunicativos. Con los Nightwish pasó lo mismo.



Este primer disco de Revolution Renaissance no es exactamente un disco de debut, pues no es la banda en sí quien lo interpreta. Más interesado en lanzar el material que en encontrar miembros permanentes para el grupo, Tolkki llamó a los “colegas” para grabarlo. Lo que pasa es que los “colegas” son Tobias Sammet (Edguy, o la exitosa saga Avantasia) y Michael Kiske (vocalista de Helloween durante la etapa de los “Keepers”) entre otros. Así cualquiera.

El disco, aunque no sea una maravilla, se deja oír. No está mal, sobre todo teniendo en cuenta el rematado coñazo que ha sacado a la venta recientemente Tolkki, titulado Saana: Warrior of Light (y es la primera parte de algo mayor). Pero New Era no tiene nada que ver con el otro despropósito. Es una vuelta de Tolkki, o eso intenta, a la época dorada de Stratovarius, cuando hacían álbumes como Visions, Episode u otros del estilo. ¿Cómo saber que se trata de una vuelta a los orígenes? Por el doble bombo. Con los grupos de power-metal la cosa va así: en un momento dado sacan un disco en el que quitan el doble bombo y los críticos lo califican como “un disco más maduro” (fue el caso del último disco de los Strato, antes mencionado). Al siguiente vuelven a usar el doble bombo y voi-la, han vuelto a los orígenes. Mi amigo Emilio tenía razón, esto de la crítica musical no es tan difícil.

Coñas aparte, es cierto que el disco nos recuerda a la etapa del visions. El problema es que nos recuerda demasiado. Así, la primera canción, Heroes, tiene un solo prácticamente idéntico al de Against the wind (del disco 4th dimension de los Strato). Sammet interperta aquí un tema con letras muy power: We are heroes in the nigh / (…) We will fly into the rainbow… “melenas al viento, mi blanco corcel indomable”. Además del corte inicial, el chico Ed nos canta una animada Glorious and divine, que tiene un aire muy hellowiniano, y más en concreto, recuerda a Where the rain grows.

Pasi Rantanen (antiguo cantante de Thunderstorm) es el tercer vocalista invitado y el que, en mi opinión se lleva la peor parte. Por un lado, es imposible competir con dos monstruos de la talla de Tobias Sammet y Michael Kiske a la hora de cantar. Por el otro, a Rantanen le caen temas de los más flojos, esas típicas canciones machaconas que uno podía encontrarse a la mitad de un disco de Stratovarius (pensad en Uncertainty, Winter, o The abbys of your eyes). De las tres que tiene que interpertar, se salva We are magic, tercer corte del disco, que trae a la memoria la mítica Paradise, y que tiene también letras muy power.Michael Kiske al parecer fue el primero que llegó a las grabaciones y le dejaron escoger primero. Se pidió cantar la mitad de los temas del álbum, y además los que gozan de ritmos más pegadizos. Me quedo en concreto con I did it my way, un medio tiempo con una cadencia en la melodía de las estrofas que es de lo mejorcito del disco. Uno se pregunta si en la letra Tolkki está intentando homenajear a Sinatra. También cabe destacar Last night on earth, tema que ya interpretasen los Strato aún en activo durante el festival de Wacken. En la versión de estudio el teclado ha quedado relegado a un segundo plano, tan solo para añadir arreglos que le den profundidad al sonido, y Tolkki se encarga de ejecutar la guitarra solista y rítmica. Kiske realiza una ejecución más que correcta, y no creo que sea apropiado compararla con la versión en directo, donde Jens Johansson al teclado comparte protagonismo en el lead. La melodía encaja con el registro de Kotipelto, quien canta cubriendo sus limitaciones con el oficio que le proporcionan doce años de giras con el grupo.



Haciendo balance, nos encontramos con un disco que tiene el sello inconfundible de Timo Tolkki. En las letras, en las melodías… En la parte buena, los temas tienen todos una duración aceptable. El más largo, Revolution Renaissance, que cierra el álbum, dura 6:10, pero el resto están entre los cuatro y los cinco minutos (Eden is burning llega a los 5:16). Eso es muy poco usual en un compositor que suele colar una o dos canciones que rondan los diez minutos, haciéndolas a veces demasiado pesadas. También nos encontramos con que Tolkki no intenta acaparar protagonismo. No hay solos interminables de guitarra. Ocupa un lugar más bien discreto, como un miembro más del grupo. ¿Un signo de madurez?

En la parte mala, pues está el hecho de que este disco tenemos la sensación de haberlo escuchado ya. Cualquier grupo heavy tiene el problema de que al sacar un nuevo trabajo tiene que mantener sus señas de identidad por un lado y aportar algo nuevo por el otro. AC/DC lleva cuarenta años sacando el mismo disco. Pero en New Era la cosa no se limita a mantener las señas de identidad de los Strato clásicos. Este disco ya lo hemos escuchado antes. Todo nos recuerda a una canción de Stratovarius o de otras bandas. Es como si Tolkki se hubiera plagiado a sí mismo. Y eso es una preocupante señal de un posible agotamiento creativo. Por otro lado está la producción. Sin ponerme tremendista como en otras críticas que he leído de este disco, sí que se nota una producción que no llega al nivel de los Elements, p.ej. También es cierto que hay un cambio de discográfica y esta vez no ha grabado el material en los estudios Finnvox, ni ha contado con la presencia de Mikko Karmila en las mezclas ni de Mika Jussila para hacer el máster. No se aprecian los elementos orquestales que solían darle una atmósfera tan característica a los otros trabajos de Stratovarius. Pueden ser prisas, pereza o una decisión deliberada. Pero poniéndonos en lo peor, me atrevería a decir que estamos escuchando una maqueta muy currada. Es inevitable, además, pensar que estamos escuchando un disco de Stratovarius pero con otras voces. Es fácil imaginar muchos temas interpretados por Kotipelto. En Youtube se pueden encontrar fragmentos de los temas del disco cantados por el pequeño finés y que corresponden a las demos que grabaron los Strato cuando se suponía que estaban ante un nuevo disco. Y en efecto, aunque son demos, se nota que se trata de canciones pensadas para la voz de Kotipelto. Con una producción en condiciones, podríamos haber tenido un interesante nuevo trabajo de Stratovarius. Pero no ha sido así.

El disco salió a la venta el pasado 6 de junio con una distribución más que discreta en España. Por lo demás, el CD viene presentado en una bedcase y no hay ninguna edición limitada. El libreto viene con las letras de las canciones y la información básica del disco. Por no tener, apenas tiene fotos. Como curiosidad, Tolkki ya ha roto el contrato con Frontiers Records. No sabemos cómo será la trayectoria de la banda, ya formada. Habrá que esperar a que saquen nuevo disco el próximo año, para escuchar de primera mano cómo suenan, si siguen en la línea de Strato o adquieren estilo propio. De momento, habrá que conformarse con este extraño disco.

Revolution Renaissance: New Era

  • Timo Tolkki: guitarra
  • Michael Kiske: voz (tracks 2, 4, 8, 9 y 10)
  • Tobias Sammet: voz (tracks 1 y 6)
  • Pasi Rantanen: voz (tracks 3, 5 y 7)
  • Pasi Heikkilä: bajo
  • Mirka Rantanen: batería
  • Joonas Puolakka: teclado
  • Netta Eklund: coros adicionales en track 10


  • Año: 2006
  • Discográfica: Frontiers Records (distribuido en España a través de Mastertrax
  • -Mezclado y producido por Timo Tolkki
  • -Grabado y mezclado en los estudios Sonic Pump y en Santa's Workshop
  • -Masterizado por Svante Forsbäck



mighty_eldarion@hotmail.com (comentarios, sugerencias, preguntas, dudas e insultos en general).